viernes, 2 de julio de 2021

Reflexiones sobre acceso universal a la renta al hilo de palabras del ministro Escrivá

 

Reflexiones al hilo de unas desafortunadas  meditaciones del ministro socialista Escrivá

 

 

Sr. Ministro:

Permítame, al hilo de sus palabras sobre los “baby boomers” y el acceso a las pensiones y rentas de los ciudadanos, unas reflexiones mías, apenas desarrolladas y en hilvanes por razón de la urgencia de contestar  a las suyas, tampoco muy maduras:

 

I.                   El acceso a una renta básica suficiente para todos los ciudadanos, e incluso para todos los seres humanos, debe ser universal e independiente del acceso al trabajo.

 

RAZONES:

1   La riqueza generada por la acción del ser humano pertenece a la Humanidad entera y no a los dueños siempre ilegítimos del Capital.

2. El acceso general al trabajo, en un mundo crecientemente automatizado, robotizado, globalizado y monopolizado, va a ser imposible tanto desde el punto de vista técnico como político y organizativo.

3. Hay que separar como realidades independientes el acceso a una renta vital básica del acceso al trabajo. La primera debe ser constitucionalmente obligada; la segunda debe ser entendida como una suerte de realización personal, vocacional, creativa y moralmente gratificante, pero, en cuanto el acceso a la renta, debe considerarse así como meramente complementaria.

 

II.               Pretender reducir, de manera única, el acceso a la renta como contraprestación al acceso al trabajo es una entelequia primitiva, injusta y condenada a la frustración y al fracaso.

RAZONES:

1.                 Actualmente los grandes detentadores de renta no acceden a ella por su trabajo sino por maquinaciones y conspiraciones inconfesables.

2.                 Sin embargo la renta es fruto de un esfuerzo y una creatividad colectiva que raramente se corresponde  con la titularidad de los que se apropian de ella.

 

Se puede suponer Sr. Ministro socialista que, a pesar de la mera nominalidad de ese calificativo, a usted no le hubieran de sonar a extrañas o revolucionarias reflexiones como las mías, pero, a pesar de que su socialismo no pretenda mucho más que obtener mediante sentidas súplicas migajas del festín del Capital, no le extrañe que haya personas que consideren urgente y necesario buscar una salida al angosto callejón en el que el Capital pretende encerrar a la Humanidad. Considéreme como una más entre ellas y, si puede, rebata mis argumentos con otros alternativos, suficientemente universales y para no mucho más de diez años de plazo.

 

Madrid, 2 de julio de 2021