"Cuelga tú,
Pedro". "No, cuelga tú, Pablo"
Una negociación sin futuro, pero donde
nadie quiere pagar el precio de aparecer como culpable de repetir elecciones.
Comentario mío a un columna de Isaac
Rosa que lleva el titular y el subtítulo que aparece arriba
No deja de tener su gracia el
planteamiento de don Isaac. Sin embargo, a mí, modestamente, me parece que la
situación no es simétrica. No me cuesta demasiado aceptar que Podemos en el
fondo quiera nuevas elecciones, pero no quiera que se lo noten - el propósito,
digo-; pero ese no es el caso del PSOE, el PSOE parece más bien que quisiera
salir bien del trance de la investidura en que, para bien o para mal, anda
metido, pero un poco como siempre, sin comprometerse realmente a nada que
disguste a los mil y un señoritos que le mandan - sus barones, sus dinosaurios,
el IBEX35, la Merkel y sus mariachis y hasta un PP furioso-, sin coger ningún
toro por los cuernos, ni resolver nada realmente serio, querría una legislatura
tranquila, a lo Zapatero, que resolviera las cosas más llamativas estropeadas
por Rajoy - última reforma laboral o casi, ley mordaza, ley Wert o así- pero
sin ninguna pretensión no ya revolucionaria -vade retro- ni referendum -
Satanás-; Pedro Sánchez sueña con ovejas mecánicas que producen directamente la
lana en jerseises, pero me temo que las ovejas ni son mecánicas ni son mansas
sino levantiscas y entrometidas y las cuentas no le salen. [Y es que con
Podemos no se Puede ... hacer lo de siempre].